El día llegó, ayer por la noche fue el pre-estreno de Harry Potter y las Reliquias de la Muerte (Parte 1); la primera mitad de la historia final del joven mago nos sitúa en medio de la búsqueda de los horrocruxes para destruirlos y terminar así con la inmortalidad de Lord Voldemort.
Hogwarts ya no es un lugar seguro, de hecho ‘ningún lugar es seguro’ (como bien rezan los carteles de este séptimo filme), desde el comienzo del filme vemos la vulnerabilidad a la que están expuestos nuestros héroes y los hechizos con los que desesperadamente quieren proteger al joven con la cicatriz.
La historia está bien llevada y no decae en ningún momento, tal vez el ritmo de la película baje como a la mitad de la cinta pero, aunque el ritmo no es trepidante, todo lo que pasa es necesario para entender la historia sin redundancias que aburran o cansen. La acción está muy bien repartida a lo largo del filme en pequeñas dosis, siendo la primera y la tercera parte las que más acción tiene, acompañada de unos estupendos efectos especiales.
El nivel actoral de los tres amigos protagonistas del filme es superior al de los anteriores filmes, especialmente Emma Watson quien, como Hermione, se lleva la película con su estupendo desempeño histriónico. Ron cada vez está más lejos de seguir siendo el miedoso del trío y demuestra que puede llegar a hacer mucho, y qué decir de Harry, más maduro y más consciente de los riesgos que enfrenta; ya está cerca de convertirse en el joven capaz de derrotar a Lord Voldemort.
La oscuridad del filme y la violencia un poco (sólo un poquitito) más fuerte, son dos aspectos que cabe resaltar de este nueva entrega. Las muertes de varios personajes están presentes a lo largo de todo el filme, algunas de ellas no se muestran en pantalla y solo se hace referencia a ellas, eso sí, nos esperan muchas muertes más en la segunda mitad de este doble evento fílmico, así que ATENCION SPOILERS si derramaron lágrimas con la muerte de Dobby al final de esta cinta FIN DE LOS SPOILERS, mejor guárdenlas para junio cuando llegue a las pantallas de todo el mundo el final de esta historia.
En resumen: Buena primera mitad del filme, con mejores actuaciones que sus predecesoras, estupendos efectos especiales que sirven de apoyo a una interesante historia bien llevada a lo largo de todo el filme, aunque el final te deja con cara “What?... That’s it?” para que no te pierdas la última cinta.
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